6.1. Implementación de la IA en Universidades Ecuatorianas
En las universidades ecuatorianas, la Inteligencia Artificial se está implementando activamente para mejorar la experiencia educativa, como parte de un proceso evolutivo sostenido durante la última década, que se ha vuelto más prominente con la aparición de los sistemas de IA generativa y los modelos de lenguaje de gran tamaño (LLM).5 Las aplicaciones de la IA en la gestión universitaria, la evaluación, la certificación y la acreditación se centran en mejorar la eficiencia y la optimización de los procesos.5
Las herramientas de IA específicas utilizadas incluyen Grammarly para corrección gramatical, Socratic para explicaciones personalizadas, Copyscape para detección de plagio, Gradescope para evaluación y calificación, Zotero para referencias bibliográficas, Wolfram Alpha para cálculos y datos, y Canva para creación de contenido visual.5 La IA también contribuye a la personalización del aprendizaje, la aceleración de la investigación, el procesamiento del lenguaje natural y los sistemas de tutoría inteligente.5
Un desafío identificado es la necesidad de que la facultad y los estudiantes reevalúen sus roles y aprendan a utilizar eficazmente estos recursos digitales para la formación de futuros profesionales.5 Por ejemplo, la Universidad de Guayaquil ha lanzado una carrera de Ciencias de Datos e Inteligencia Artificial 100% en línea.42 La Universidad Técnica Particular de Loja (UTPL) se enfoca en la innovación educativa con IA, optimizando procesos laborales y académicos, y fomentando la creación de contenido académico innovador.43 Una encuesta a estudiantes ecuatorianos reveló que el 90% percibe que la IA mejora la calidad de su aprendizaje, y el 100% considera necesaria una capacitación adicional para maximizar su uso.12
La adopción de la IA en las universidades ecuatorianas, que refleja las tendencias globales, demuestra un claro compromiso para aprovechar la tecnología en la mejora educativa y la eficiencia administrativa. Sin embargo, el énfasis en herramientas para tareas básicas (gramática, plagio) y el desafío identificado para que la facultad y los estudiantes se adapten sugieren que, si bien se reconoce el potencial de un cambio transformador, la implementación real aún podría estar en sus primeras etapas, centrándose en las ganancias de productividad más que en cambios pedagógicos más profundos. Esto indica una brecha entre la aspiración y la integración práctica generalizada, lo que requiere capacitación específica y un desarrollo estratégico de políticas.